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tips para lidiar con una amistad tóxica: Cada
vez que quedas de hacer algo con un cierto amigo o amiga, o hablas por
whatsapp, te quedas con sabor amargo, al principio no logras identificar bien
cuál es el motivo del sinsabor, luego te pones a pensar y descubres las razones
a veces sutiles a veces más evidentes que un elefante en pleno comedor.
Pueden
ser las bromas pesadas, los desprecios sutiles, o la queja perpetua, lo cierto
es que luego del contacto con esta persona se sientes AGOTADO, como si te
hubieran chupado toda la energía vital. Es
hora de que abras los ojos y te des cuenta que se trata de una relación toxica,
agota y no aporta mucho, todos cambiamos y aquella amiga o amigo del alma, la
persona compañera de mil aventuras y confidencias, con la que compartías penas
y glorias, ya no es la misma, se ha convertido en alguien que es mejor evitar.
Motivos
porque una persona se vuelve toxica: Porque
te toma de chivo expiatorio para hacerse el gracioso. Le gusta el poder en el
grupo y se aprovecha todo el tiempo de ti para quedar como el ídolo de todos.
Te puede hacer comentarios, que te dejan en un mal lugar o busca ridiculizarte
bajo la excusa: “son bromas, no te lo tomes así.
Porque
tu “amigo” te tiene envidia. Puede que sea la principal causa. Es una emoción
profundamente virulenta. Quizá ni hayas sido consciente de que esa persona a lo
largo del tiempo ha ido adquiriendo una envidia hacia a ti, que le lleva a
darte malos consejos en tu relación de pareja o temas personales que le
comentas, se alegra de que hayas fracasado en algo o que critica cualquier cosa
que te haya ido bien.
Porque
tiene una gran rigidez mental y no para de cuestionarte. Esto ocurre si tu
“amigo” es de los que se sienten jueces del mundo y carecen de autocrítica para
ellos mismos. Puede que en el pasado los dos estuvieran más alineados en gustos
o en formas de ver la vida, pero todos cambiamos y hay que aprender a aceptar
el punto de vida del otro.
Porque
es solamente te busca para hablar sus problemas. Se apoya en ti para contar lo
mal que va su vida y no para de hablar de sus desgracias, no escucha, su vida
siempre es peor que la tuya y etc., etc., etc. Normalmente, las personas que
refuerzan su autoestima en dar pena a otros necesitan de alguien que les
escuche. Si te ha escogido a ti y tú no compartes esta tendencia, las
conversaciones te pueden agotar profundamente.
¿Cómo
lidiar con ellos?:Deja
de fantasear con que tu “amiga/o” vaya a cambiar. Las personas somos lo que
somos y, con el tiempo, vamos acentuando una de nuestras características. Es
posible que tu “amiga” o “amigo” sea muy simpático, te rías mucho, pero en el
fondo sabes que te tiene envidia, por ejemplo. Esto último no lo puedes tú
cambiar y es lo que te lleva a aguantar muchos comentarios incómodos. Por lo
tanto, acepta que él es así y acepta también que esa parte te hace daño. Y si
no te conformas, pues dilo.
Dilo
de frente. Delicadamente, claro. No quieres pelear, pero sí llamar la atención.
Es posible que tu amigo no se dé cuenta de que su comportamiento te molesta o te
hiere y es necesario que sepa exactamente lo que sientes, y si lo comprende
bien y sino ya sabrás que decisión tomar.
No
te involucres:Si
ves que está empezando a actuar de una forma que te incomoda o molesta cambia
de tema o busca una excusa para irte, no quieres darle razones para que te haga
pasar mal.
Pon
límites. Aunque compartan un mismo grupo, quizá sea el momento de decir basta.
Tienes derecho a que se te respete. Ni aceptes bromas que no te gustan ni
comentarios a tus espaldas. Confróntalo. Puedes quedar un día con él o con
ella, se lo dices y le das una oportunidad. Si no lo reconoce o si persiste, es
mejor buscar otros amigos que aguantar el dolor de no ser respetado (y al fin y
al cabo, a los amigos los escogemos, ¿no?). Eventualmente si le importas, te
preguntará qué pasa y en ese momento tendrás la oportunidad de explicarle que
su comportamiento no te gusta y por qué.
Desahógate
y agradece. Escríbele una carta, aunque no se la mandes para agradecer el
pasado, desearle suerte en el futuro y comenzar una vida separados. La rabia
tampoco es una buena emoción para ti y no vale la pena mantenerla hacia nadie.
Déjalo
ir:Si
las cosas no mejoran vas a tener que tomar una decisión dura. ¿Puedes dejar ir
a una persona importante de tu vida? Es una decisión que ningún experto del
mundo puede tomar por ti, pero p hay ciertas cosas que no deberías tolerarse
nunca. Por ello, y si ya te ha ocurrido más de unas veces, sé firme. Nada es
eterno, ni la amistad. Y esa persona perteneció a tu pasado y muy probablemente,
el futuro te aguarde mejores amigos para crear relaciones mucho más saludables
si eres capaz de romper con las tóxicas.
Una amistad tóxica puede tener efectos
nocivos incluso e la salud y la vida es
demasiado corta para pasarla con gente que no nos hace bien.
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