La ira, un sentimiento fuerte que todas hemos
experimentado en algún momento de nuestra vida, pero que deberíamos controlar
para evitar afecciones en nuestra salud emocional y física. Te contamos cuáles
son.
Enojarse es un estado común en la vida de las
personas. La ira aparece cuando consideramos que algo no está funcionando como
lo habíamos planeado o cuando se nos presenta un problema con una persona
cercana o superior. Si dejamos que éste estado nos controle por completo, puede
que terminemos cometiendo actos sumamente negativos que perjudiquen de uno u
otro modo la tranquilidad de nuestras vidas y hasta la salud física y mental de
nuestro cuerpo.
Según la American Psychological Associantion
(APA), enojarnos no siempre es negativo ya que hay causas justas que hacen que
tomemos éste tipo de reacción. Enojarse no solo es gritar, ponerse roja,
levantar los parpados y fruncir el seño, también puede ser una reacción leve
que no se demuestra, pero que si causa serias afecciones en nuestra salud.
Si eres una de las mujeres que vive enojada
constantemente y que por más que trates de calmarte y controlar el entorno no
lo logras, hazlo, porque si no lo haces puedes sufrir o generar estas
consecuencias:
1. El lóbulo frontal derecho de nuestro
cerebro es el encargado de controlar las emociones negativas y el izquierdo las
positivas. Cuando nos enojamos el lóbulo frontal derecho de nuestro cerebro se
activa haciendo que la racionalidad se pierda, esto eleva los niveles de dopamina
generando que las zonas del cerebro que nos permiten auto controlarnos se
inactiven. Esta actitud hace que al estar en este estado cometamos actos que no
hacemos en estado normal.
2.Un estudio de la Universidad de Harvard
afirma que cuando nos enojamos, el cerebro necesita mayor oxigeno, esto causa
que nuestros pulmones necesiten cargar más cantidad exponiéndolos a terribles
afecciones respiratorias.
3.Al enfurecernos por completo la red de
terminales nerviosas ubicadas en el cerebro se activan, logrando que nos
sintamos amenazados, causando que las plaquetas de la sangre aumenten para que
nuestro cuerpo en caso de peligro no sienta dolor por la ira.
4.Enojarnos hace que nuestro cuerpo libere
colesterol y sustancias catecolaminas que son las que permiten que los
depósitos de grasa del corazón y las arterías se aceleren, esto ocasiona una
descarga de adrenalina extrema afectando seriamente la buena salud del corazón.
5.La ira genera una gran cantidad de
emociones en un solo momento lo que hace que las células del cuerpo se aceleren
tres mil veces más rápido de lo normal envejeciéndonos en tiempo record.
Para que no sufras todas las consecuencias
negativas que trae el estar enojado te recomendamos que controles tus emociones
con estos consejos:
1. Respira profundo
2. Busca frases inspiradoras que te relajen
mientras controlas la respiración lentamente.
3. Imagina una situación bonita, agradable e
ideal que te haga sentir muy feliz.
1. Haz
ejercicio o yoga para que se relajen tus músculos y logres nivelar los
sentimientos llegando plenamente a la sensación de calma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario