Aunque algunas fallas se enmiendan
fácilmente, hay otras que no tienen remedio. Por eso, es mejor que rompas si...
1.
Te parece que hace un siglo que no te ríes. Las relaciones no son
siempre fáciles, pero los buenos ratos deben pesar más que los malos.
2.
Siempre están mal sincronizados. Cuando tú estás más abrumada en el
trabajo él, de repente, te necesita más que nunca. Cuando él se siente sensual,
a ti te duele la cabeza.
3.
Tus amigos unánimemente lo odian. A tus amigos no los ciega el amor, por
lo tanto, pueden ver las faltas en tu novio y en tu relación que tú no puedes
ver.
4.Constantemente estás protegiéndolo y excusándolo. No puedes seguir
diciendo que él está desempleado porque es artista. ¿A quién estás tratando de
convencer tú?
5.
Han dejado de conversar. Mientras los dos puedan hablar, hay esperanzas.
Una vez que ninguno de los dos oye al otro, hay poco combustible para mantener
vivo el fuego.
6. No puedes vivir con las diferencias que existen entre los dos. No están
de acuerdo en las cosas importantes y no pueden resolver las diferencias; por
ejemplo, cómo quieren vivir la vida.
7. Ya no eres la misma. Ya no te sientes libre para hacer o decir lo que
quieres por temor a dar comienzo a una gran pelea.
8.
El ha abusado de ti físicamente. Si él te ha agarrado, empujado
violentamente o te ha pegado, no es que vayas camino a una relación infernal,
es que ya estás metida en ella. En otras palabras... ¡sal corriendo!
Toda pareja locamente enamorada tiene que
ventilar sus diferencias de vez en cuando. Pero, ¿qué pasa cuando él y tú se
pelean constantemente por la misma condenada cosa, y no hay manera de hallar la
solución? Tal vez lo que más te moleste a ti sea su descuido con el dinero,
mientras que tu excesiva frugalidad lo vuelva loco a él. O quizás sea su estilo
de vida descuidado lo que atormenta a la perfeccionista que llevas dentro, pero
él contraataca advirtiéndote que tienes que despojarte de tu veta obsesiva.
Dinero, amigos, carreras... cualquiera que
sea al punto espinoso, si los dos no llegan a un compromiso, pueden estar
creando las bases de una seria contienda con potencial para destruir un
romance. Entérate aquí de la señales que te dirán si ya no hay nada que hacer o
si, por el contrario, tienen esperanza.
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