Cómo hacer para que tus malas relaciones pasadas no afecten tu presente

Luego de una ruptura amorosa, no siempre es sencillo seguir adelante. Algunas personas son capaces de dar el cierre y pasar a otra cosa. Otras, en cambio, no tienen esa facilidad, y terminan arrastrando su pasado como una carga muy pesada.

Lo peor de todo es que esto lo único que puede hacer es afectar las relaciones futuras. Para que esto no te suceda si estás en una situación similar no te pierdas este informe.

1.Honrar el amor y lo aprendido: Si la relación anterior fue muy positiva, es difícil que ésta quede en el pasado y siga siendo parte del presente. Es como sentir que se está deshonrando su recuerdo, y que es sinónimo del bien de tu último amor.

En lugar de sentir culpa, es mejor reconocer y valorar los buenos momentos vividos. Eso no significa que debamos olvidar todo a la hora de conocer una nueva pareja, sino que somos resultado de nuestras experiencias pasadas.

Pero por sobre todo, no es manera de vivir arrastrando el pasado en cada paso, sobre todo si ya se tiene una relación actual. Se trata de convivir pasivamente con el pasado, como parte de uno mismo.

Tener una ceremonia de clausura: Si es necesario, para cerrar un último capítulo de una relación pasada, ayuda tener una ceremonia oficial de clausura. Siempre estamos acostumbrados a celebrar el comienzo de algo, pero también es necesario hacerlo cuando termina.

Una forma de hacerlo es escribiendo en un pedazo de papel todas las dificultades y recuerdos que aún quedan en la mente. También sirve escribir una carta a una misma, recordándote todas las experiencias positivas y negativas, la sabiduría ganada.

Hay quienes hacen una fogata, botan todos los recuerdos, o hacen una promesa. Lo importante es tener una propia ceremonia de cierre de la relación pasada para que ésta no afecte el presente.

Expresa tus miedos: Es de mucha utilidad compartir tus temores y pensamientos recurrentes con alguien que te pueda ayudar a procesar las emociones que se niegan a quedar en el pasado. Puede ser un terapeuta, psicólogo, entrenador, amigo o algún miembro de la familia.

No hablar sobre las cosas con las que luchamos internamente las vuelve más fuertes, por eso compartirlas, alivia un poco el peso y la intensidad. Aunque resulte tentador de contárselo a la pareja actual, debe realizarse con mucho cuidado y prudencia.

Lo importante es tratar de encontrar la paz para ti misma y poder vivir a pleno tu pareja actual.