¿Control o protección?
Teóricamente la diferencia parece muy evidente, no todas se percatan cuando
están siendo víctimas de un control ya desmedido por parte de su pareja. Y esto
sucede muchas veces porque se malinterpreta el hecho de que aceptamos que nos
protejan. Todos sabemos cuáles son las diferencias entre control y protección,
pero no siempre queremos verlas. ¡Presta atención a estas señales!
El control tiene que ver con
los celos no con protegerte, ni cuidarte de peligros.
Muchas veces creemos que:
“Si me controla es porque le importo”, “si tiene celos es porque me valora y
atesora”, “si se enoja es porque tiene motivos”. No seas ciega, te estas
equivocando. Los celos no son amor, el control no es protección.
Las señales….
Necesita saber dónde estás:Si te tardas un poco más de
lo usual en llegar a casa ya te está escribiendo, con un tono demandante. Y si
de por ahí no le contestas, No duda en contactar a las personas más cercanas a
ti, sin que exista ningún motivo para sospechar que algo te haya sucedido.
Quien hace esto es una persona que busca ante todo control.
Necesita tener comunicación
permanente:Cuando te das cuenta de que
se enoja por cada mensaje y llamada no contestada, en tiempo y forma (según el)
deberías parar el oído. Tú tienes y necesitas conservar tu espacio y no tienes
por qué estar dando explicaciones de todo lo que haces, al principio te puede
resultar halagador que alguien esté tan pendiente de ti, créenos, con el tiempo
te agobiará y desgastara.
Todo el tiempo te da su
“veredicto” sobre a quienes aprueba y a quiénes no:Los controladores no dudan,
en hacer saber a quiénes aprueban y a quiénes no de tu circulo. Ya sean ex
parejas, amigos del sexo opuesto, amigas o hasta incluso se atreven a opinar de
familiares, no les importa, lo dicen porque sienten a la pareja como una pertenencia.
Y entonces se dedican a buscar y encontrar supuestas amenazas por todos lados.
No le gusta que estés lejos
por mucho tiempo:Quienes controlan a sus
parejas son a su vez posesivos y no les agrada la idea de tener que «compartir»
a su pareja con nadie, ni con amigas y mucho menos con amigos. Se sienten mejor
cuando pasan más tiempo juntos.
No te da privacidad:Revisar mensajes en el
celular o entrar en las redes sociales de su pareja es algo muy típico de los
controladores. Lo hacen porque sienten la necesidad de saber con quién habla su
pareja y por qué. También sienten que tienen el derecho a cuestionarte sobre lo
que leen o ven.
Revisar, tu bolso o tu auto,
con cualquier excusa, que generalmente tiene que ver con que es “por tu bien”
es absolutamente normal para ellos, tal vez, no lo hagan con maldad o de manera
consiente, simplemente los controladores no conocen los límites y el impulso de
tener a su pareja bajo control los domina.
Te sientes restringida:Si tienes la sensación constante
de que no puedes ser tú misma, a tus anchas, siempre en el fondo de tu cabeza
estas pendientes de la reacción de tu pareja y que no puedes vivir la vida que
quieres, escucha a tu instinto, ¿después de todo, cuando te ha fallado? y
presta atención a las acciones de tu pareja y analízalas.
La controladora es una
persona que en el fondo esconde una inseguridad muy grande. Y esas
inseguridades hacen le hacen creer que tienen el deber de controlarlo todo,
cuando en realidad es evidente que resulta una tarea imposible controlar el
100% del tiempo a tu pareja, obsesionarse con eso lleva a un profundo desgaste
mental tanto del controlado como del propio controlador. (El que quiere
engañar, lo hará).
Por eso hay que estar muy
atentos, no solo a cómo se comporta nuestra pareja, sino también cómo nos
comportamos nosotros, ante estas situaciones.
Cuando nos sentimos seguros
de nosotros mismos y nos aceptamos, no necesitamos enfocar toda nuestra energía
y pensamientos en nuestra pareja. Para
mantener una relación de pareja sana y feliz a veces solo hace falta estar muy
despiertos y saber qué queremos.
Aprender a confiar es clave
para el controlador, si tu pareja tiene esas tendencias en primer lugar debes
aceptarlo y con mucho cariño, paciencia, pero firmemente ir poniendo en claro
los límites y establecer la diferencia entre control y protección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario