miércoles, 10 de enero de 2018

Deja de amar a quien no te valora


El amor es la experiencia más maravillosa del ser humano… cuando es correspondido.

Si no lo es, la desesperanza, la tristeza y el desánimo nos invaden. Nos sentimos poca cosa y no sabemos qué hacer ni por qué nos ocurre esto. Estudios científicos han demostrado que el rechazo activa las mismas neuronas sensibles al dolor, las cuales se activan por el dolor físico y puede desencadenar la misma respuesta en tu cerebro que surge al renunciar a la adicción a una droga.

Un sinfín de preguntas, probablemente sin respuesta, te golpean una y otra vez: ¿Por qué esa persona especial no nos valora? ¿Qué hemos hecho mal?


La gran pregunta

Estás perdidamente enamorada/o de alguien, haces hasta lo imposible por estar con él/ella, te esfuerzas en complacer y ayudar a esa persona, pero no le interesa tu amor,  no te valora.

¿Es posible dejar de amar a quien no te ama? ¿Podemos controlar nuestros sentimientos? Es desagradable y hasta perjudicial estar pensando en una persona que no siente nada por ti.

No puedes controlar cómo te sientes, pero sí aprender a superar el dolor que provoca un rechazo sentimental, para así seguir adelante con tu vida.


Estos son algunos consejos que te servirán si estás en esa situación. Y si no es así, pásalos a alguien que los necesite.
1- Lo primero que debes hacer es asumir la situación, darte cuenta de que a esa persona no le interesas para nada. Tus amigas/os o familiares, que de alguna manera ven la situación desde afuera, podrán ayudarte y aconsejarte, porque a veces el amor no nos deja apreciar bien las cosas.

2- Aléjate de la persona, date un tiempo. No niegues tus sentimientos ni los ahogues “con música y alcohol”, como dice la canción. Es normal que sientas dolor y pases un mal momento, pero la forma de superarlo no es negándolo de alguna manera. Asume que no puedes de ninguna manera dominar o controlar lo que piensa o siente: frases como “haré que vea lo que yo siento por ella”, no son nada realistas ni positivas. Este alejamiento también incluye las diferentes redes sociales y por supuesto, no crees perfiles falsos para espiar. Además, deshazte de todos los objetos que te traigan recuerdos, es un paso muy importante en el proceso de recuperación.


3- Busca amigos y actividades que te alejen de los pensamientos hacia esa persona: cursos, ejercicios, viajes, libros, estudio, etc. Son todas actividades que te permitirán llenar tu tiempo libre y tu pensamiento.

4- Cortar por un tiempo todo contacto con esa persona también implica deshacerte de los recuerdos y objetos que te la recuerdan. Conservarlos solo hará más difícil alejarte y olvidarte.

5-  Las frases como “no puedo olvidarlo”, “no dejo de quererlo”, “no puedo vivir sin él”, “la vida no tiene sentido” no son ciertas y no te llevan a nada bueno. Tampoco es acertada la famosa “Un clavo saca a otro clavo”: si aún no estás en condiciones de mantener otra relación, opta por estar solo o sola. En ocasiones, comenzar una relación en situaciones de inestabilidad emocional no hace más que llevarte a cometer errores y basarte en premisas falsas. También puede hacer que inconscientemente te aproveches de la otra persona, porque tus sentimientos no están claros en ese momento.


6- Analiza lo que realmente quieres en una relación. Haz una lista sincera y objetiva sobre lo que consideras más importante: amor, los mismos valores, apoyo, amistad, buen humor, complicidad, confianza, inteligencia, realización personal, etc. Compáralo con la relación que tienes con tu actual pareja: si no cumple con tus expectativas ¿por qué estás con ella?

7- Tenías una vida antes que esa persona llegara a tu vida: trabajabas, estudiabas, tenías tu círculo de amigos (o varios), encuentros familiares, etc. Retomar esa vida será una muy buena terapia e incluso puede servirte para conocer otras personas en círculos de confianza. Cuando te sientas en condiciones de comenzar una nueva relación, hazlo.

8- No ocultes tus sentimientos, llora si deseas hacerlo. Esta acción puede reducir las sensaciones de ansiedad, furia e incluso estrés. Desahógate, busca a alguien con quien puedas hablar sobre lo que sientes y del momento que estás atravesando. Puede ser con un amigo o un familiar. Podría ser un terapeuta, especialmente si se trata de una larga relación y en la situación hay muchos elementos implicados.

9- Evita la violencia: gritar, golpear y romper cosas puede “sentirse bien” al principio, pero algunas investigaciones sugieren que usar la agresividad extrema para expresar tu enojo, incluso en objetos inanimados, puede empeorar tus sentimientos de furia. Enfócate en hacer actividades que te gusten y te sirvan para descargarte: hacer música, leer, escribir, un deporte que te guste, etc. A las personas más introvertidas les es muy útil escribir sobre lo que piensan y sienten.

10-  Modifica tu rutina, haz un viaje o si no es posible, cambia la ruta por la que vas habitualmente al trabajo o inicia un curso. Probar cosas nuevas ayuda a salir de lo acostumbrado y a cambiar hábitos, porque remueve los esquemas mentales.

11- Si es necesario, pide ayuda profesional, especialmente si surgen síntomas como cambios en tus hábitos alimenticios o de sueño, sensación de desesperanza o incapacidad para las tareas diarias, cambios pronunciados en tu estado de ánimo normal, dificultad para controlar los pensamientos negativos o pensar en hacerte daño de alguna manera.


12- Aunque te cueste darte cuenta en este momento, piensa que ahora estás en una situación mejor, porque no estás con alguien que no te ama ni te valora. Dejar ir a esa persona, aunque sea doloroso en este momento, es lo más positivo para ti. Es mejor que te alejes a tiempo y encuentres el amor verdadero, comenzando por amarte y valorarte.

Considera esta experiencia, que ahora es dolorosa, es muy positiva, porque te permitirá salir fortalecido y enfrentar la vida de una mejor manera más adelante, comprendiendo de mejor manera tus emociones y necesidades.


El amor debe ser recíproco; de lo contrario, es otra cosa

No hay comentarios:

Publicar un comentario