miércoles, 10 de enero de 2018

¿Qué viste primero en esta imagen? Tu respuesta te dirá mucho sobre el momento que estás viviendo




La forma de mirar al mundo define cómo eres. Los humanos no somos capaces de recordarlo todo, y tampoco podemos prestarle atención a todas las cosas. El cerebro siempre tiene que elegir a qué le dará importancia.

Aquello a lo que le prestamos atención tiene que ver con cuestiones de la personalidad que traemos desde la cuna, pero también con las experiencias vividas a lo largo del tiempo, con los aprendizajes.

Un poco sobre eso va este test.

Sólo debes mirarlo atentamente y responder a la pregunta: ¿Qué viste primero, un chico o una chica?

Tu respuesta te dirá cómo eres, cómo estás en este momento de tu vida y a qué te enfrentas actualmente.

Que ves primero chico chica

Una chica

Si lo primero que viste fue una chica, tienes muchas cosas buenas por delante. Es que la chica mirando hacia arriba demuestra mucha seguridad y autoconfianza. Esto habla de que has llegado a un momento de la vida en el que puedes pensar en ti mismo, y priorizarte ante los demás.

¿Cuántas veces te haz dejado de lado para darlo todo por otros? Seguramente han sido demasiadas. Por eso, ahora eres capaz de decir basta, y eso es muy sano para cualquiera. No lo confundas con el egoísmo. Al contrario: sólo si estás bien podrás dar algo bueno al mundo.

Tienes el mente crecer, desarrollarte, y eso es lo mejor que puedes hacer. ¡Disfruta! Y recuerda, que te mereces cuidarte y ser feliz.


Un chico

Si lo primero que viste fue al chico, seguramente estás en un momento en el que tu vida gira mucho alrededor de otros.

Eres un compañero leal, y nunca te faltarán amigos: eres la clase de persona que siempre está cuando otros lo necesitan. Te gusta estar rodeado de gente, y compartir cosas con los demás, eres extrovertido y simpático. Por eso, no te cuesta relacionarte con nadie, y eso te ayudará a llegar lejos.


Pero detrás de esa sociabilidad, puede haber una persona que no se anima a profundizar dentro de sí. No estás del todo seguro de ti mismo y tus capacidades, y por eso te aferras al entorno y a tu "yo exterior". No descuides lo más profundo de tu ser, pues ahí están las respuestas.

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