El uso excesivo de Internet puede llevar tu relación a la ruina. Debes evitar estos 10 puntos claves.

Cuando nos enamoramos y comenzamos una relación de pareja todo suele resultar bastante fácil y gratificante. Las hormonas del amor realizan la mayor parte del trabajo y suavizan los defectos del otro llevando las virtudes hasta extremos casi imposibles. Sin embargo, después de esta etapa comenzamos a conocer en profundidad a la persona por la que nos sentimos atraídos.

 Esta nueva fase, sin duda, es mucho más plena y enriquecedora. Aquí comienza la verdadera aventura emocional pero ahora tenemos que poner más de nuestra parte. Mucho se habla de los cuidados que hay que dispensar para alimentar el fuego del amor. Elementos como detalles, sorpresas y novedades refrescan el ambiente y lo renuevan pero hay algo imprescindible sobre lo que asentar una buena relación: estar presente para nuestra pareja. Estar presente significa estar física, emocional y mentalmente disponible. Siempre ha habido elementos distractores pero hasta ahora no había resultado tan fácil desconectar de alguien estando en el mismo espacio. ¿Responsables? El uso abusivo de las nuevas tecnologías puede crear físuras en los vínculos emocionales. Si quieres mantener en forma tu relación de pareja toma buena nota:

1. Fija un tiempo limitado para navegar por Internet

Consultar Internet no tiene por qué ser algo negativo. Al contrario, informarnos, entretenernos y distraernos ha formado siempre parte del ocio. Lo que sucede es que ahora la oferta es ilimitada por lo que somos nosotros los que tenemos que dosificarnos. Puedes introducir en tu rutina diaria un momento para navegar por la red. Establece un tiempo y respétalo. Tú pareja sabrá que estás ocupado pero que cuando termines estarás disponible para charlar, realizar alguna actividad en común o sencillamente abrazaros.

2. Evita tener el móvil cerca cuando estés en casa

Llevar el móvil siempre encima es algo que no solo hacemos cuando estamos fuera de casa. Trasladarlo de habitación en habitación para consultarlo compulsivamente no solo hace que interrumpamos continuamente nuestras tareas sino que genera una gran ansiedad. Déjalo junto a las llaves cuando entres en casa, disfruta de tu descanso y tu intimidad. Escucha a tu pareja, mírala con los ojos de la primera vez y deja que surja la espontaneidad. Atraviesa los silencios e incluso el aburrimiento, todo forma parte de la relación y es necesario para que trabaje la creatividad.

3. Silencia las notificaciones

No hay nada más molesto que estar con alguien y escuchar como ese insistente pitido en su móvil anuncia una notificación. Nada puede ser tan urgente que no pueda esperar. Además, el saber que hemos recibido alguna novedad va a hacer que sintamos la urgente necesidad de consultarlo de inmediato y esto romperá la atención que estábamos teniendo hacia la otra persona. Si no contestas, tu mente estará divagando sobre el origen de la notificación, si contestas, estarás dando prioridad a un elemento externo frente a la persona con la que te estabas comunicando.

4. Sustituye el mensaje escrito por una llamada a tu pareja

Sí, a veces es más cómodo y más rápido, escribes el mensaje y lo envías. También puede ser que el otro te conteste y cuando te des cuenta estés inmerso en una conversación virtual dejando de atender lo que estabas haciendo. Para, marca su número y llama a tu pareja, será unos minutos pero mucho más directo y gratificante. Un emoticono nunca puede sustituir un “te quiero” al otro lado de la línea.

5. Jamás discutas por correo electrónico o por chat

La comunicación a través de texto es muy limitada, los malos entendidos y las distorsiones en el mensaje son habituales cuando nos limitamos a la palabra escrita. El tono, los gestos, en definitiva, la presencia es fundamental para una buena comunicación. Las posibilidades de aumentar el desacuerdo se multiplican cuando discutimos sin estar presentes. Si hay algo que te ha molestado de tu pareja o necesitas aclarar cualquier asunto, no te precipites. Puedes esperar hasta que os veáis, además esto dará tiempo a que las emociones se suavicen y así ir con mejor disposición para afrontar las diferencias.

6. Aparca eso tan importante que tienes que decir para cuando os reencontréis

Adelantar los asuntos a través de la red suele ser algo habitual. Es más, a veces, se comete la imprudencia de utilizar las redes sociales para anunciar algo que compete al ámbito de la pareja. Piensa si lo que tienes que decir pertenece al ámbito de vuestra intimidad y si es así compártelo con tu compañero o compañera a solas. Regalar un plan especial es algo maravilloso pero quizás sea mejor que se lo comuniques de forma privada a que se entere por la red. Crea un espacio íntimo para compartir tu día, lo que te ha sucedido y cómo te sientes. De igual modo, escucha a tu pareja y cultiva la comunicación directa.

7. No abuses de los mensajes, deja espacio para echaros de menos

Hay personas que desde que se levantan están narrando su rutina diaria, mandando fotos o interrogando al otro sobre lo que está haciendo en cada momento. Parece que todos tenemos que estar disponibles y conectados. Puede resultar romántico y bonito que en un momento dado mandes un mensaje a tu pareja o compartas algo que te ha llamado la atención. Igualmente es importante que respetemos nuestro espacio personal, estar desconectado no significa que no amemos solo que valoramos nuestro tiempo y dedicación a nosotros mismos. Es importante cultivar un espacio individual para que funcione una relación de pareja, si no, caeremos en la dependencia emocional y en una baja autoestima.

8. Evita controlar a tu pareja a través de sus conexiones

Las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea se han convertido en ocasiones en herramientas para controlar al otro. Cada vez hay más casos de rupturas porque se utiliza la conexión como prueba de amor. Una aplicación es solo eso, una aplicación, hay decenas de elementos que influyen en nuestros hábitos y no podemos exigir de nadie una disponibilidad absoluta. La confianza es fundamental en una buena relación y si tienes que estar pendiente de los movimientos del otro es mejor que te preguntes qué está pasando. Preocuparte por cuándo se ha conectado por última vez o cuánto tarda en responderte lo único que hará es que tu mente cree historias que te hagan sufrir. Si tienes dudas, afronta la situación y habla con tu pareja.

9. Evita consultar el móvil cuando están juntos

Céntrate en la persona que tienes delante, recuerda la primera vez, cuando nada era más importante que ella. Puedes renovar esa magia si te abres a la intimidad que surge cuando estás con tu pareja. Pero para eso hay que mirar al otro a los ojos, escuchar y ponerse en disposición de comprender. Apaga el ordenador y guarda el móvil. Estate atento a ver qué sucede.

10. No abras puertas que ya estaban cerradas

Antes cuando una relación se terminaba era más fácil poner punto y final. Hoy en día podemos seguir teniendo noticias de antiguas parejas e incluso es fácil que aparezcan relaciones del pasado. Valora lo que tienes en este momento y respeta tu relación. Una inocente distracción puede traer graves consecuencias. Esa emoción que buscas la puedes cultivar y encontrar en tu pareja, y además en directo.

Recuerda que una relación amorosa necesita cuidado, dedicación y una comunicación sincera. Es el mejor regalo que puedes hacer a tu pareja.