Existe una teoría que apunta
a que la abuela materna es la responsable de heredar una mayor carga genética a
sus nietas, hijas de sus hijas (no de su hijo). Este fenómeno solo se
produciría en la cadena femenina, convirtiéndose en una valiosa herencia.
Si te preguntas por qué
sucede esto solo en la línea femenina tiene que ver con las células sexuales.
Cuando una mujer concibe a un feto mujer, este ser ya contiene la cantidad de
ovocitos que serán óvulos en su vida adulta, de aquí se transmiten valores genéticos
de generación en generación por el lado femenino, siendo la abuela materna
quien transmite a sus nietas la herencia biológica.
¿Qué es lo que podemos
heredar de nuestra abuela materna?
Cuando nuestra abuela tuvo
hijas mujeres, y a su vez estas hijas tuvieron otras mujeres, se dio un
fenómeno biológico muy especial. Por medio de ese fenómeno se transmiten
importantes valores genéticos. Además, un ley genética apunta a que ésta se
salta una generación. Así podemos ver que muchas personas tienen rasgos de sus
abuelos, como son gestos, color de ojos o incluso el temperamento. El mayor
peso de este hecho de traspolación genética lo lleva la abuela materna, sus
hijas y nietas, que se van traspasando carga genética en los ovocitos.
Gracias a estos fenómenos
curiosos de la naturaleza es probable que las mujeres tengan grandes parecidos
a sus abuelas, tanto en el físico como en el temperamento o incluso con tics y
manías. Incluso es probable que durante el embarazo una mujer sienta los mismos
síntomas que tuvo su abuela al estar embarazada de su madre.
¿Por qué ocurre solo en la
cadena femenina y no en los hombres?
Esto ocurre también por las
células sexuales. Solo los óvulos tienen información mitocondrial, no así los
espermios. Por lo que este tipo de información genética solo puede transmitirse
entre mujeres y no hombres. Así es que las mujeres recibimos una hermosa
herencia de nuestras abuelas que llevamos desde el momento de nuestro
nacimiento y podemos seguir entregando mientras haya hijas mujeres. Ahora
empieza a fijarte en el parecido que tienes con tu abuela. O en el parecido de
tu hija con tu madre. ¿Cuáles rasgos reconoces?
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