
Actualmente, la amplitud del
concepto inteligencia emocional implica que tiene diversas definiciones. Una de
ellas refiere a saber trabajar nuestras propias emociones de manera que nos
sean de ayuda, que representen una alerta en nuestra vida y que no nos
perjudiquen. Esto incluye el saber reconocer nuestras emociones, interpretar lo
que nos quieren mostrar, elaborarlas, poder expresarlas de manera sana y poder
reflexionar en torno a ellas, obteniendo aprendizajes y experiencias. Al mismo
tiempo, suelen poder evitar la explosión de emociones en contextos inadecuados,
por ejemplo: en una discusión con tu jefe en tu trabajo.

Lo anterior incluye una
habilidad en cuanto a la esfera interpersonal, debido a que si se tiene bajo
control las emociones propias, entonces se puede entender con mayor facilidad
lo que puede estar sintiendo el resto, o cómo se les puede hablar de temas
difíciles sin ser impertinente, ni caer en comentarios basados sólo en las
emociones que se puedan sentir. Lo anterior es útil para mantener relaciones
sanas con todo el mundo. También tienen la sabiduría para elegir sabiamente la
cercanía que quieren lograr con las personas. Evitando así situaciones
desagradables.
Al respecto, el poder
reaccionar de manera apropiada en cada ocasión, nos puede ayudar a
relacionarnos mejor con las personas en entornos familiares, sociales e incluso
puede aumentar nuestras competencias laborales, debido a que podemos acceder a
mayor información, a que nos ayuden más fácilmente y a trabajar de manera más
eficiente con el resto.

La inteligencia emocional es
una característica clave para ser un buen líder, un buen jefe o un buen
emprendedor. Debido a que, es una cualidad que se debe tener para que las
personas se sientan cómodas contigo, confíen en ti y te quieran seguir.
A continuación, te presentamos
lo que debes hacer para fomentarla.

1. No creerás que tu
percepción equivale a la verdad:Las personas que tienen
inteligencia emocional, suelen aceptar sus emociones como respuesta a una
situación en concreto que se las pudo haber provocado. Saben que dichas
emociones pueden haber cambiado su manera de percibir la realidad, por lo que
aceptan que pueden estar equivocados o que pueden haber visto alterada su
percepción de los hechos debido a sus emociones. Ellos aceptan que no son
perfectos y que se pueden equivocar en cuanto a expresar sus emociones. Sin
embargo, pueden arreglar la relación con el otro, pidiendo perdón y aceptando
sus errores.

2. No culpar a los demás de
sus emociones:Este punto refiere a que la
alta inteligencia emocional se caracteriza por ser siempre su propio punto de
referencia. Es decir, no culpan a otros por sus errores, debido a que saben que
lo que sienten en su interior, no viene necesariamente de la situación que
están viviendo. Puede que la situación lo ponga en evidencia, sin embargo,
saben que las emociones son algo que experimentan desde su interior. Además,
tienden a asumir sus propios errores, a hablar de sus sentimientos y poder
enfrentar sus emociones, lo que los hace reflexionar y madurar.

3. No rechazan el miedo ni los
sentimientos negativos:No tienen problema en
reconocer lo que de verdad sienten. Pueden admitir que tienen miedo y no tienen
vergüenza de llorar.
El miedo y el dolor, son
mecanismos de defensa de nuestra mente. En muchos casos son emociones
beneficiosas, debido a que puede que nos aparten de situaciones que pueden ser
verdaderamente perjudiciales. El secreto está en aceptarlo y en darse cuenta,
cuando éstas emociones nos están protegiendo y cuando nos están coartando o no
nos permiten tener ciertas experiencias, por medio de las cuales podríamos
crecer.
Las personas con una buena
inteligencia emocional, saben que todas las situaciones son pasajeras, incluso
las peores.

4. Están abiertos porque no
saben qué les hará felices:Las personas que han
desarrollado la inteligencia emocional, se abren a nuevas experiencias,
sabiendo que éstas pueden ser una oportunidad y que es importante el tener
variedad de acontecimientos, para evadir el aburrimiento. En general, se
caracterizan por no tener prejuicios y por no privarse de las experiencias
nuevas. Saben que si es que no prueben, no podrán saber con seguridad lo que
les trae felicidad.
5. No dejan que nadie decida
por ellos:Tienden a tomar las decisiones
por ellos mismos, aunque pueden escuchar otras opiniones o puntos de vista. Sin
embargo, saben que la decisión final la tienen ellos.

Saben llevar una conversación
al respecto de forma adecuada y amena, en donde aceptan que los demás no tienen
por qué estar siempre de acuerdo con ellos.
Lo anterior tiene base en
mantener un buen equilibrio entre escuchar a los otros y hacer lo que ellos
creen que les conviene más o que es una mejor decisión para ellos.
6. No son perfeccionistas ni
ejercen un férreo control sobre ellos mismos:Saben que no siempre es
posible el contener los sentimientos, por eso prefieren liberarlos con
frecuencia, en contextos donde es adecuado, en lugar de permitir que los
sentimientos se acumulen y puedan explotar en alguna situación inadecuada. En cuanto al perfeccionismo,
éste genera una gran cantidad de estrés y ansiedad, al estar constantemente
exigiéndonos el hacer todo perfecto. También nos puede generar tristeza o
frustración, cuando nos damos cuenta de que no podemos hacer todo perfecto o
como nosotros queremos. Al respecto, los que tienen una alta inteligencia
emocional, saben que no todo depende de ellos y que equivocarse es una
posibilidad real, de la cual pueden aprender y mejorar.

7. No regalan su amistad a
cualquiera:Iniciamos el artículo hablando
de las posibles capacidades sociales que pueden tener las personas con una alta
inteligencia emocional, sin embargo, ser una persona sociable, no significa que
se sea amiga de todo el mundo, implica el saber elegir a qué distancia se
quiere tener a cada persona. Elegir esto sabiamente, normalmente les evita la
experiencia de tener mucha cercanía con personas inadecuadas. Por ende, suelen
ser lo suficientemente amables con todo el mundo, sin embargo, su círculo
íntimo es estrecho y cuidadosamente elegido.
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